Close
Mundo Política

Nueva cárcel para migrantes en los Everglades ¿Qué hay detrás?

Ambientalistas, comunidades indígenas y ciudadanos advierten que el proyecto ignora leyes federales, amenaza especies en peligro y pone en riesgo décadas de restauración ecológica.

Nueva cárcel para migrantes en los Everglades ¿Qué hay detrás?
Redacción Mas Latino
  • Publishedjulio 1, 2025
Foto de Blue Hound en Unsplash

Este martes, 1 de julio el presidente Donald Trump y el gobernador Ron DeSantis inauguraron el campamento de detención para migrantes “Alligator Alcatraz” en los Everglades de Florida. Ubicado en un antiguo aeropuerto, el centro tendrá capacidad inicial para 3.000 personas y un costo anual estimado de 450 millones de dólares.

El entorno pantanoso de los Everglades, con caimanes, panteras y víboras, se usará como medida de seguridad natural. Aunque Trump lo calificó como “modelo nacional”, organizaciones ambientalistas y comunidades indígenas ya presentaron demandas por su impacto ecológico y por la omisión de leyes ambientales.

El proyecto busca acelerar deportaciones masivas y aliviar la presión sobre los centros fronterizos.

Para ahondar en el proyecto, este centro de detención se ubica en la Reserva Nacional Big Cypress; el corazón de los Everglades. Durante una reunión pública reciente, defensores del medio ambiente, especialistas legales y ciudadanos manifestaron su rechazo al proyecto, alegando que amenaza décadas de esfuerzos de restauración ecológica y viola leyes ambientales federales.

Falta de evaluación ambiental y solicitud de medidas urgentes

En una rueda de prensa organizada por Friends of the Everglades, Paul Schwiep, portavoz de los demandantes, denunció la falta de un análisis ambiental integral y anunció que han solicitado una audiencia judicial acelerada, así como una orden de restricción temporal para detener las obras mientras se lleva a cabo el estudio exigido por la ley. Según afirmó, las autoridades estatales están ignorando las normativas medioambientales vigentes.

Amenazas a especies en peligro y al ecosistema de Everglades

Elise Bennett, bióloga especializada en conservación del Center for Biological Diversity, enfatizó los riesgos directos que enfrentan especies en peligro, como la pantera de Florida y el murciélago de Florida con capuchón, así como diversas aves zancudas y ecosistemas de humedales especialmente sensibles a los contaminantes. Además, advirtió sobre los efectos negativos de la contaminación lumínica y sonora, que pueden alterar significativamente los patrones de comportamiento de la fauna silvestre.

Un proyecto sin transparencia y con alto costo económico

Elisa subrayó que los contribuyentes han invertido miles de millones de dólares en la restauración de los Everglades, considerado el mayor proyecto de recuperación de ecosistemas en el mundo. Cuestionó la opacidad en torno al nuevo proyecto, el cual según dijo, carece de información adecuada para el público y de estudios de impacto ambiental detallados.

Por su parte, Eve Samples, directora ejecutiva de Friends of the Everglades, calificó el proyecto como “una de las peores ideas de Estados Unidos” y criticó duramente al gobernador Ron DeSantis por, según dijo, haber abandonado su compromiso con la protección del ecosistema. Asimismo, advirtió que el funcionamiento de la instalación podría costar más de 400 millones de dólares anuales, una cifra que ha generado preocupación tanto en sectores conservadores como progresistas.

Unidad ciudadana y acciones futuras

Durante el evento, los oradores remarcaron que la oposición al centro de detención va más allá de los grupos ambientalistas: incluye a cazadores, residentes locales y personas de diversas ideologías políticas. También se discutió la posible expansión del sitio, la existencia de estructuras permanentes y la presunta intención del estado de evadir los requisitos de la Ley Nacional de Política Ambiental (NEPA) mediante poderes de emergencia.

Al cierre, los participantes reafirmaron su compromiso con la defensa de los Everglades como parte esencial de la identidad y salud ambiental de Florida.

Para más historias como esta, sigue a Más Latino.

Fuentes: