Boston Celtics despierta: triunfo contundente ante los Pelicans
Boston aplastó 122-90 a los Pelicans con una actuación colectiva brillante y Simons encendido, logrando su primera victoria del año.
Hameltion, CC BY-SA 4.0, via Wikimedia Commons
Después de un arranque de temporada lleno de dudas, los Boston Celtics ofrecieron este lunes una actuación dominante en su visita a los New Orleans Pelicans, imponiéndose con un rotundo marcador de 122-90. La victoria significó el primer triunfo de la campaña para el conjunto dirigido por Joe Mazzulla, que necesitaba con urgencia una muestra de carácter tras tres derrotas consecutivas.
Un inicio arrollador por parte de los Boston Celtics
Desde el salto inicial, Boston mostró una energía completamente distinta a la de sus partidos anteriores. La defensa fue intensa, el movimiento de balón fluido y la puntería desde el perímetro marcó la diferencia. El escolta Anfernee Simons fue la gran figura del encuentro con 25 puntos, incluidos seis triples, que encendieron al equipo y silenciaron al público del Smoothie King Center.
El primer cuarto terminó con una ventaja de 14 puntos para los Boston Celtics, y a partir de ahí el equipo no soltó el control del partido. En la segunda mitad, los Celtics ampliaron la diferencia con un juego colectivo sólido que desbordó a los Pelicans en todos los frentes.
Profundidad y trabajo en equipo
Una de las claves del triunfo fue la distribución ofensiva. Seis jugadores de Boston superaron los diez puntos, mostrando una rotación equilibrada y un ataque difícil de contener. Además de Simons, Jayson Tatum aportó 20 puntos y 8 rebotes, mientras que Jaylen Brown sumó 18 puntos y contribuyó en defensa con tres robos.
El base Derrick White también destacó con su habitual energía, comandando el ritmo y aportando tanto en ataque como en defensa. En conjunto, los Celtics lanzaron con un 48% de acierto en tiros de campo y limitaron a los Pelicans a solo un 39%, además de forzar 16 pérdidas de balón.
Los Pelicans, sin respuesta
Por el lado de New Orleans, la noche fue cuesta arriba desde el inicio. Zion Williamson intentó liderar a su equipo con 22 puntos, pero fue insuficiente ante la solidez defensiva de Boston. Los Pelicans nunca encontraron ritmo en ataque y fueron superados físicamente en los tableros, donde Boston capturó 54 rebotes contra 38 del rival.
El entrenador Willie Green reconoció al final del encuentro que su equipo “fue superado en intensidad y ejecución”, y subrayó la necesidad de ajustar la defensa perimetral de cara a los próximos compromisos.
Un triunfo necesario
Para los Celtics, este resultado representa algo más que una simple victoria. Es un golpe anímico positivo tras un inicio tambaleante y una muestra del potencial que el equipo puede desplegar cuando logra sincronía en ambos extremos de la cancha.
“Sabíamos que necesitábamos un partido así”, declaró Jayson Tatum tras el encuentro. “Hemos trabajado duro, y hoy se vio reflejado el esfuerzo. Lo importante será mantener este nivel cuando regresemos a casa”.
Boston regresará al TD Garden para enfrentarse a los Cleveland Cavaliers, buscando confirmar la recuperación y establecer una racha positiva. Por su parte, los Pelicans deberán reagruparse rápidamente antes de su gira por la Conferencia Oeste, donde enfrentarán a equipos de alto nivel como los Warriors y los Mavericks.
El contundente 122-90 deja a los Celtics con un mensaje claro, y es que, cuando juegan con intensidad y concentración, siguen siendo uno de los equipos más temibles del Este.
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Sources:
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