Israel illegally intercepts the Global Sumud flotilla, uses rhetoric as a weapon, and prepares deportations
Israel interceptó la flotilla humanitaria Global Sumud en aguas internacionales, deteniendo a más de 400 activistas de más de 40 países. Entre ellos hay latinoamericanos cuya deportación aún está en

Foto tomada de GSF Media Kit Oficial
La Flotilla Global Sumud fue interceptada por Israel entre el pasado 1 y 3 de octubre, declarando que “la provocación Hamas-Sumud” había terminado. Y así mismo confirmó que comenzaría la expulsión de los activistas detenidos a sus países, principalmente a Europa. El operativo abarcó la detención de más de 400 de participantes que venían de más de 40 países—entre ellos latinoamericanos—generando reacciones inmediatas a nivel internacional.
La comunidad internacional ha protestado no solo porque la flotilla era hasta el momento la mayor misión marítima civil organizada para romper el asedio ilegal de Israel a Gaza. Fueron organizadores comunitarios, marineros, médicos, artistas y activistas solidarios quienes conciliaron la flotilla. Los cuales no cumplen con los perfiles terroristas que Israel propone que están en colaboración con Hamas.
Y es importante resaltar que la flotilla fue constituida como una misión humanitaria no violenta respondiendo al genocidio y el asedio contra el pueblo palestino. Incluso, en el inicio y durante su coordinación, públicamente siempre se sostuvo una promesa de ayuda solidaria—cumpliendo con un rol diplomático informal.
La acusación de vínculos de flotilla Sumud con Hamas como arma retórica
Según el Ministerio de Exteriores de Israel, interceptar la flotilla estaba dentro de los procedimientos para “poner fin a la provocación de Hamas-Sumud” y agregó que concretar la deportación de los participantes en esta “farsa” [según ellos] era algo que se “tenían que hacer”.
También le han sumado a la retórica videos de barcos de las flotillas vacíos, donde presuntamente no había ningún tipo de ayuda humanitaria y que esto “demostraría” una supuesta alianza con Hamas.
No obstante los tripulantes y otros aliados de la flotilla han dado declaraciones de prensa oficiales defendiéndose de estas incriminaciones, declarando que su única intención es y ha sido apoyar a Palestina y su derecho de ser un país soberano desde la resistencia global.
“Esta campaña sistemática de desprestigio contra la flotilla no tiene que ver con la ayuda; se trata de que Israel intenta borrar la evidencia de sus crímenes deslegitimando a quienes buscan defender el derecho internacional. La verdad no se puede borrar. Las imágenes de hambruna, niños esqueléticos, estantes vacíos y familias desesperadas bajo asedio están grabadas a fuego en la conciencia mundial.
Los hechos son claros: la flotilla transportaba ayuda humanitaria, Gaza sufre hambre deliberadamente e Israel está perpetrando un genocidio. Es deber de la comunidad internacional dejar de perpetuar las mentiras de Israel y empezar a actuar para poner fin a su bloqueo, su hambruna y su genocidio”. —Comunicado de Prensa Oficial, Flotilla Global Sumud, 3 de octubre de 2025.
La estrategia retórica de Israel al calificar a los activistas como “peticionarios de Hamas” o “colaboradores indirectos” funciona como justificación anticipada para medidas opresivas como la obstrucción de ayuda humanitaria. Además, no hay bases documentales para esas acusaciones llevando a los aliados globales a percibir esto como “chimenea política” que neutraliza legitimidad internacional de los voluntarios.
La legitimidad de la interceptación y el avance en las expulsiones
Esclareciendo que la Flotilla Global Sumud fue interceptada en alta mar y no en aguas territoriales ni bajo la jurisdicción de Israel. Conforme el derecho internacional bajo la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (UNCLOS), cualquier estado costero—como lo es Gaza, en Palestina—tiene soberanía sobre su mar territorial hasta 12 millas náuticas.
Esto va desde su línea de base, incluyendo el lecho marino, el subsuelo, y el espacio aéreo sobre esas aguas. Así que el control que Israel ejerce en la práctica (patrullaje naval, imposición de permisos, vigilancia, bloqueo) no simboliza una jurisdicción legal reconocida y soberana. Especialmente ante reclamaciones, declaraciones de organizaciones de derechos humanos y la abogacía internacional que lo consideran territorio ocupado.
En tal caso, Israel mediante uso ilegal de la fuerza detuvo y trasladó arbitrariamente y sin fundamento legal a los más de 400 participantes. Y oficalmenHasta el momento, se sabe oficialmente que 170 de ellos fueron liberados a Europa—Greta Thunberg incluida.
A excepción unos 150 activistas de la flotilla que permanecen detenidos en la prisión israelí de Ktziot. Entre ellos varios latinos como Manuela Bedoya y Luna Barreto, que según reportes del gobierno Colombiano, su liberación se anticipa para el martes 7 de octubre de 2025. Y otros tantos, que por motivos diplomáticos de sus países con Israel están con detalles indefinidos de su liberación o su regreso a casa.
Esta es una noticia en desarrollo.
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