¡Consumo de alcohol en EE. UU. cae a mínimo histórico!
El consumo de alcohol en EE. UU. cae a mínimo histórico por temores de salud; más de la mitad cree que beber es dañino.
Foto de Adam Wilson en Unsplash
El consumo de alcohol en Estados Unidos cayó a un mínimo histórico: solo el 54 % de los adultos afirma beber, según una encuesta de Gallup publicada este miércoles. Se trata de la cifra más baja desde que la firma comenzó a medir este hábito en 1939.
Preocupación creciente por la salud
El sondeo revela un cambio significativo en la percepción de los riesgos del consumo, incluso moderado. Un 53 % de los adultos considera ahora que beber “uno o dos tragos al día” es perjudicial para la salud, frente al 28 % en 2015. El salto se atribuye sobre todo a los jóvenes, aunque los adultos mayores también muestran un aumento en esta preocupación.
Durante años, estudios sugerían que el consumo moderado podía tener beneficios, especialmente para la salud cardíaca. Sin embargo, nuevos análisis han demostrado que el alcohol está relacionado con múltiples enfermedades, incluido el cáncer. El cirujano general Vivek Murthy propuso en enero incluir advertencias claras en las etiquetas de bebidas alcohólicas sobre su vínculo con 100.000 casos de cáncer y 20.000 muertes anuales en EE. UU.
Patrones de consumo en retroceso
La encuesta indica que, incluso entre quienes beben, la frecuencia de consumo disminuye. Solo un cuarto de los bebedores dijo haber tomado alcohol en las últimas 24 horas, un mínimo en la serie histórica. Además, cuatro de cada diez aseguraron que había pasado más de una semana desde su última copa.
Tendencia más marcada en jóvenes y mujeres
Históricamente, los jóvenes lideraban el consumo, pero hoy su tasa es menor que la de los adultos de mediana edad. Entre 18 y 34 años, dos tercios creen que el consumo moderado es dañino, en contraste con solo 4 de cada 10 hace una década.
El gobierno federal prepara una actualización de sus recomendaciones alimentarias, incluidas las relativas al alcohol. Actualmente, se aconseja que los hombres no excedan dos tragos al día y las mujeres, uno. El secretario de Salud, Robert F. Kennedy Jr., ha prometido cambios significativos en estas pautas, aunque aún no ha adelantado su contenido.
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